Estadísticas reveladoras

Las datos muestran que aproximadamente 90 % de las startups fracasan.

La razón número uno por la que fracasan las startups es una mala interpretación de la demanda del mercado en el 42 % de los casos.

Esto se debe a que en gran parte de los casos, los negocios emergentes tienden a saltar directamente a la fase de diseño y desarrollo del producto para salir rápido al mercado con los consiguientes riesgos de fracaso que ello implica.

 

Cuándo se necesita una prueba de concepto

Cuando un nuevo producto sale al mercado suele encuadrase en estos dos supuestos: o sigue la estela de otras apps parecidas por lo que el market-fit está probado o se trata de un producto completamente innovador. En este último caso, una prueba de concepto es imprescindible como primer paso antes de aventurarse a financiar un proyecto no alineado con el mercado o no testado adecuadamente. En el primer caso, aunque en principio parezca innecesario, para destacar será necesario implementar alguna funcionalidad disruptiva que necesitará probar su necesidad y que está alineada con el mercado.

 

Una prueba de concepto en el desarrollo de apps: definición

Una prueba de concepto – en el contexto del desarrollo de apps -, también conocida como PoC (proof of concept), es una metodología que permite verificar que la idea o asunción que tenemos sobre el software es viable. Por tanto se trata de probar que la app puede funcionar tal como hemos pensado (o haciendo los ajustes necesarios) en la vida real antes de comenzar la fase de diseño y desarrollo.

La prueba de concepto no es un producto, sino un ejercicio de comprensión técnica de la viabilidad de la idea. Debemos ser capaces de entender si nuestro proyecto puede salir adelante con la menor inversión posible. Es cierto que a veces esto implica la implementación de la solución de una manera rudimentaria para verificar que el producto puede ser explotado por el usuario final de manera útil.

Dependiendo de la solución a probar, la prueba de concepto puede adoptar varias formas. Puede servir un documento técnico, pero también como comentábamos antes una demo muy básica o una presentación. En este punto no es necesario invertir en el diseño de la app ni en desarrollo de código. Pero debemos hacer hincapié en las especificaciones técnicas y en la necesidad en su caso de terceros productos que habiliten el correcto funcionamiento de nuestra app.

 

Diferencia entre prueba de concepto, prototipo y MVP

La prueba de concepto, como paso previo al diseño y desarrollo de apps, puede fácilmente confundirse con otros conceptos como el de producto mínimo viable (MVP) o prototipo. Para un experto en producto estos matices son muy importantes, así que vamos a hacer un repaso previo de estos conceptos para no confundirnos.

 

diferencias prueba concepto, MVP, prototipo

 

Prueba de Concepto

El principal objetivo de la prueba de concepto es comprobar la viabilidad técnica de la solución.

La PoC sirve como ejercicio empírico para entender el funcionamiento del proyecto por lo tanto se debe definir un objetivo claro desde su inicio y su consecución nos dará la confianza suficiente en la solución que vamos a construir.

Por lo tanto una PoC se hace imprescindible para evidenciar frente a socios o inversores que la idea de negocio funciona. 

 

Prototipo

El prototipo pone el foco en ver cómo resulta el diseño y la interacción del producto.

Crear un prototipo permite obtener un diseño dinámico de la aplicación móvil y tener una idea de en qué consiste en poco tiempo.

El resultado es un prototipo de la solución móvil que permite demostrar todo lo que el producto puede llegar a hacer. Por lo tanto en este caso, y a diferencia del PoC, la inversión es reutilizable cuando se alcance la etapa del diseño de la app.                      

 

Mínimo Producto Viable (MVP)

El MVP persigue construir una versión del producto que satisfaga las necesidades core del usuario. El objetivo por tanto es ya crear un producto con las características suficientes como para recibir feedback del mercado.

La hipótesis por tanto en este caso se prueba ya con el lanzamiento de un producto real al mercado. Este producto, para cumplir con los condicionantes del MVP, debe ser «mínimo» porque solo contiene la funcionalidad esencial y «viable» porque está testado como para ser válido para el usuario final.

 

Beneficios de validar tu app con una prueba de concepto

Llegado a este punto ya debes tener claro si tu producto necesita una prueba de concepto y las principales diferencias con otras

con otros conceptos que también validan el producto con propósitos distintos. Así que ahora vamos a centrarnos en los beneficios que nos proporciona llevar a cabo una prueba de concepto antes de la fase de diseño de la aplicación móvil.

 

Asegurar la viabilidad antes del lanzamiento

El fin de nuestra prueba de concepto (PoC) será demostrar que la idea es viable desde un punto de vista técnico y que puede construirse. Además, indicará la dirección técnica correcta para que la app consiga su propósito, analizando dependencias externas y valorando la necesidad de terceros productos.

 

Entender el producto

La PoC sirve como ejercicio empírico para entender el funcionamiento del proyecto por lo tanto si se define un objetivo claro desde su inicio, nos permitirá darnos cuenta de las limitaciones, ventajas e inconvenientes de la solución y nos ayudará a priorizar de manera más inteligente la funcionalidad.

 

Mitigar el riesgo

La consecución de la prueba de concepto como primer paso antes del desarrollo nos dará la confianza suficiente en la solución que vamos a construir. El saber que hemos elegido el camino correcto, disminuirá la incertidumbre respecto a costes y viabilidad y asegurará que la inversión no va destinada a un producto que va a ser un fracaso seguro tras su lanzamiento.

 

Convencer a los inversores

Aunque lleves a cabo la prueba de concepto como primer paso del proyecto, el camino por recorrer sigue siendo largo y necesitarás probablemente financiación externa. Esta prueba previa demuestra que tomas decisiones con los pies en la tierra y que comprendes el presupuesto necesario teniendo una evidencia sólida de que está en el camino correcto.

 

Caso de éxito: cómo hacer una prueba de concepto para apps

En este ejemplo que te presentamos, una empresa que organiza tour turísticos quería prescindir de los dispositivos transmisores y receptores que suelen usarse para que los turistas escuchan al guía durante las vistas guiadas.

Este innovador desafío necesitaba validar técnicamente que se podía efectivamente dejar de lado cualquier aparato que no fuera el propio teléfono móvil del guía y del turista para realizar visitas guiadas. Por tanto nuestro equipo recomendó al cliente una inversión inicial dedicada solo a una prueba de concepto para no invertir en desarrollo hasta asegurar la viabilidad de la solución.

En este caso, se creó sin diseño un simulador de comunicación que permitió validar la idea del cliente y conocer con menos incertidumbre el coste del proyecto y sus probabilidades de éxito. A partir de ahí creamos una solución de retransmisión de audio en directo en streaming que solo necesita el dispositivo móvil del usuario.

ejemplo como hacer prueba concepto

Conclusión

Por lo tanto una PoC se hace imprescindible para evidenciar frente a socios o inversores que la idea de negocio funciona. En el océano de apps en el que se han convertido los stores, tener una funcionalidad disruptiva o una idea de negocio innovadora es ya casi una premisa básica para destacar y por eso cada vez es más necesario recurrir a una prueba de concepto antes del diseño y desarrollo de la solución móvil.